Limpiar y deshollinar tu chimenea y estufas
ayuda a una mejor combustión
mejora el rendimiento
contribuye a evitar el recambio de piezas
ayuda a prevenir posibles averías
reduce tu factura energética
La combustión de madera o carbón produce una sustancia llamada creosota que puede impedir el correcto funcionamiento de tu chimenea y estufas.
LImpia tu chimenea y estufas exhaustivamente una vez al año, al finalizar la temporada de uso
Haz un mantenimiento una vez a la semana durante el invierno.
La limpieza periódica de chimeneas y estufas es fundamental para tu seguridad.
